miércoles, 2 de abril de 2008

INFLACIÓN GALOPANTE EN ZIMBABWE



PERIODISTA.- Recientemente, la crisis económica de Zimbabwe está siendo noticia. Para hablar sobre esta crisis, contamos con la presencia de nuestro autor. En primer lugar, ¿qué sucede actualmente en Zimbabwe?

AUTOR.- Los hechos son: una inflación del cien mil por ciento, un paro del 80% y una recesión económica. Lo más llamativo es la hiperinflación, la mayor de todo el mundo.

PERIODISTA.- ¿Cuáles han sido las causas de esta hiperinflación?

AUTOR.- Esta pregunta me parece muy interesante. El centro de la cuestión es qué ha causado semejante crecimiento de los precios.
La verdadera causa es la emisión de dinero para pagar las obras prometidas por el octogenario dictador Robert Mugabe para la reeleción. Lo curioso es que no hay reelección ni antes la hubo, por los continuos fraudes electorales que se han producido en Zimbabwe, en beneficio de la gerontocracia vigente.
Por su parte, Mugabe desvía la atención de las causas hacia las sanciones internacionales, verdaderamente minúsculas aunque magnificadas con intención demagógica. Es la vieja estrategia del dictador que pretende anestesiar al pueblo a base de mentiras radiadas a toda hora, tratándolo de unir a los súbditos entorno a su persona, en contra de enemigos reales o ficticios.
Estas sanciones internacionales son irrisorias en comparación de los pagos que hubo de satisfacer la república de Weimar tras la Primera Guerra Mundial. Estos pagos se financiaron vía impresión de marcos, que perdieron rápidamente su valor (hecho estudiado históricamente como la hiperinflación alemana). En el caso alemán, los factores son externos, porque las sanciones se imponían desde fuera, pero en el caso zimbabwense, los factores son fundamentalmente internos.





PERIODISTA.- Además de conocer las causas de semejante espiral de precios, ¿qué consecuencias se dan en este caso de hiperinflación?

AUTOR.- En un caso de estanflación tan claro como el tratado, la implicación más evidente es una pérdida del poder adquisitivo. Los salarios no aumentan apenas y los precios suben aceleradamente. Además, la hiperinflación altera el comportamiento de la población, que prefiere desanimarse en la búsqueda de trabajo porque el coste del transporte de unos días supera el sueldo de todo un mes.
En estas condiciones, la crisis adquiere unas dimensiones tales que la situación llega a ser de quiebra.




PERIODISTA.- Resulta paradójico que las consecuencias sean tan negativas cuando se busca un apoyo popular en las urnas (aunque sea amañado después). Entonces, ¿por qué se causa este mal a la población?

AUTOR.- Como usted dice, resulta paradójico. Atribuyo la responsabilidad de la quiebra de Zimbabwe a la ignorancia del régimen, que da la espalda a cualquier principio elemental de teoría económica.
Lo más racional es que se cumpla el caso descrito en la teoría económica del Public Choice, esto es, aumento del gasto público en vísperas de las elecciones para mantenerse en el poder. De esta manera, los ciclos económicos tienen un tinte político. Como decía en “CHINA, CRECIMIENTO Y DICTADURA”, el beneficio colectivo es el instrumento para el beneficio individual del dictador, es decir, seguir mandando. En esta línea, citaba el caso chino.
Lo contradictorio es una pérdida de bienestar colectiva con la intención de seguir mandando, ante unas falsas elecciones con carácter de referéndum.




PERIODISTA.- Iba a preguntarle ahora sobre las consecuencias a largo plazo de la hiperinflación sobre la moneda de Zimbabwe. Pero este tema requiere un apartado aparte.
Una pausa y seguimos aquí, en Radio Global.






1 comentario:

Sakurada Fuuko dijo...

Esta entrada me ha gustado porque no sabía exactamente qué ocurría. Sólo un pequeño comentario que debes recordar en tu próximo post, haz una breve explicación y diferencias entre inflación, hiperinflación e inflación galopante. Para la gente que no estudie economía estos términos no deben de serles muy conocidos.

Un saludo.